RMD es una industria de reciclaje de ámbito internacional, cuya central está ubicada en León, contando con sedes en Barcelona, Sevilla, Tánger y Casablanca. Su actividad industrial opera dentro del sector del Reciclaje, entre otros, productos con contenido en metal y neumáticos usados, de los que se obtiene el caucho.
La empresa decidió apostar por calefactor todas sus instalaciones (edificios administrativos, duchas de los trabajadores y zonas específicas de las naves) con una caldera de biomasa. Ésta está conectada a una red de agua con la que distribuye el calor a las diferentes zonas de la planta. RMD aprovecha la astilla que genera al reciclar los pallets de madera, con lo que tiene un fuerte ahorro en calefacción.
RMD apostó por Hargassner ya que exigía una caldera que le diera garantías de fiabilidad y de eficiencia.
En este caso, la caldera está conectada a la red de calor y suministra calor a varios depósitos y gestionando varios circuitos de calefacción. El silo lo llenan con el elevador vertical de astilla por lo que tienen una gran comodidad de uso.
A raíz de su buena experiencia con la biomasa, RMD ha abierto un nuevo sector de negocio, que es el de Gestor Energético (ESE), apoyandose en Hargassner para sus proyectos: por la disponibilidad que tienen de biomasa es una opción lógica para aprovechar los recursos que tienen.
