Esta es una de las conclusiones del Estudio del Impacto Macroeconómico de Energías Renovables en España en 2015, presentado el pasado mes de noviembre.
A continuación nos centraremos en mostrar y analizar algunos de los datos más importantes que están relacionados directamente con la biomasa.
La biomasa como principal fuente para la generación térmica. Gráfico 1
La biomasa térmica representó en el año 2015 más del 91% del consumo térmico en España. Cifra que la sitúa como la primera fuente renovable más consumida por los españoles. En concreto fueron 3,936 los ktep, unidad equivalente a 1.000 toneladas petróleo, de biomasa los que se gastaron en 2015.
Según el estudio, basada en datos de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) la biomasa cuenta con una potencia instalada de 1.036 MW y es capaz de generar un volumen de energía equivalente a 4.935 GWh.
Las otras fuentes de energía renovables se sitúan muy lejos de la biomasa. La solar térmica con 227 ktep, un 6,47% es la segunda en consumo. El biogás (51ktep, 1,18%) y la geotérmica (19,8ktep, 0.46%) completan los 4.283,6 ktep consumidos en España durante el año 2015.
La biomasa aporta más de 82 millones de € al PIB. Gráfico 2
Otra parte importante del informe sobre la situación de las renovables en este país es que la aportación al PIB de la biomasa térmica continua creciendo año tras año.
En concreto, durante el 2015 fueron 82,49 los millones que la biomasa térmica aportó al PIB. La contribución está en constante incremento año tras año. Esta cifra cercana a los 83 millones significa un aumento de 14 millones desde el año 2012 al PIB español.
Entendemos como biomasa térmica aquella que es utilizada para generar agua caliente y calefacción en edificios públicos y viviendas privadas. Las características propias de la biomasa cada vez son más reconocidas por la sociedad. Su estabilidad de precios, y comodidad son factores que permiten a la biomasa posicionarse como una alternativa a los combustibles fósiles tradicionales.
Resulta significativo que en unos años donde el precio del gasóleo es más bajo de lo normal, la biomasa siga creciendo y aportando cada vez más al PIB.
Destacar también que la contribución directa de la biomasa a la economía española se cifra en 53 millones, mientras que la llamada aportación indirecta, es decir, aquel impacto inducido por los trabajos de recogida, procesado y transporte del combustible, son unos 29 millones aproximadamente.
El nivel de empleo relacionado con la biomasa sigue creciendo. Gráfico 3
El incremento de un 4% del empleo generado por este tipo de energía renovable en España no es más que una consecuencia directa de lo explicado anteriormente sobre el aumento a la aportación al PIB de la biomasa.
Dentro de estas cifras, el estudio divide a los empleos en directos e indirectos. De las 3.020 personas que se asocian al empleo del sector de la biomasa, 1.954 son de carácter directo y 1.066 indirecto.
En este último grupo se aglutinan todos los trabajos de cuidado de bosques, deforestación, etc. Por su parte, los puestos de trabajo directos se asocian a la extracción, transporte y transformación de la biomasa en energía térmica.